El Mundial de Qatar se disputará entre el 21 de noviembre y el 18 de diciembre del presente año, siendo el primero en la historia en jugarse en invierno y no en verano como se tenía acostumbrado.
Tras el nombramiento en 2010, el país árabe se disponía albergar el Mundial 2022 y comenzaría con la realización de estadios, aeropuertos, hoteles y carreteras para recibir al público turista.
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Para lograr su cometido, Qatar contrató a migrantes de la India, Pakistán, Nepal, Bangladesh y Sri Lanka para trabajar en el estadio Khalifa y en el Aspire Zone que es una instalación deportiva.
Desde 2017 el gobierno catarí implementó medidas para proteger a los migrantes que trabajaban en sus obras, reconociendo que algunas prácticas habían sido eliminadas, sin embargo, informaba que los empleados aún sufrían presiones por parte de los jefes.
Condiciones laborales inhumanas
Human Rights Watch, la cual es una organización no gubernamental dedicada a la investigación, defensa y promoción de los derechos humanos, señaló que en 2021 los obreros eran sometidos a deducciones salariales ilegales y punitivas, así como a meses de salarios no pagados tras horas largas horas de trabajo.
La prensa británica afirmo que 6,500 trabajadores extranjeros habían muerto en Qatar desde que el país de Medio Oriente logró la candidatura para realizar la Copa del Mundo.
Deepak, obrero quien laboró en las obras del estadio Khalifa, le dijo al medio digital amnesty: "mi vida aquí es como es una cárcel. El gerente de la empresa me dijo: si quieres trabajar en Qatar, cierra la boca y sigue trabajando".
Ante esos informes, el gobierno catarí expreso que esas cifras eran una sobreestimación porque incluían a miles de extranjeros que murieron después de trabajar y vivir allí. Para las autoridades los informes contabilizaban a personas que no estaban ni siquiera vinculadas con las construcciones.
Para la Organización del Trabajo Internacional (OIT), 50 trabajadores murieron y más de 500 resultaron gravemente heridos solo en 2021, y otros 37,600 sufrieron lesiones leves o moderadas.
Grupos vulnerables
Además de pésimas condiciones laborales, en el país anfitrión del Mundial se prohíbe la homosexualidad considerándose ilegal.
El país de Medio Oriente prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo y otorga una condena de cinco a aquellas incurran en este delito.
Por otro lado, Amnistía internacional afirma que las mujeres en Qatar siguen siendo vista como objeto y sufren de discriminación en la ley y en la práctica.
Ante esos cuestionamientos, el director del comité organizador del Mundial mencionó que se aceptarán personas con diversidad sexual en el certamen futbolistico, sin embargo, pide que se respete la tradición de su país y no se muestre afecto en público.
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