Un lamentable incidente manchó el meritorio triunfo de la Selección de Honduras ante México que vivió una noche para el olvido en el estadio Morazán de San Pedro Sula.
La fiesta catracha se arruinó por un inadaptado que lanzó una lata de cerveza que impactó en la cabeza del entrenador mexicano Javier Aguirre quien se percataba como correteaba la sangre por su testa.
El seleccionador nacional Reinaldo Rueda se ha referido nuevamente al tema y en una reciente entrevista confesó lo que conversó con el Vasco Aguirre tras recibir certera agresión por parte de un aficionado hondureño.
"El saludo normal, el colegaje y más un hombre de la trayectoria del profesor Javier Vasco Aguirre, sabemos su internacionalidad con clubes grandísimos con selecciones, hacía muchos años no nos encontrábamos.
Quizá uno de primeros juegos como seleccionador fue con Colombia en un juego amistoso enfrentando a México que se iba despedido al Mundial Corea y Japón 2002, cuando el profesor Vasco Aguirre fue a ese Mundial. En ese momento nos acordábamos de ese Mundial que fui con un grupo de Colombia al Azteca, para un partido de despedida", dijo Rueda en plática con Grupo OPSA.
Sobre el amargo momento vivido con el Vasco Aguirre
Rueda también recordó el momento exacto que vivió tras la agresión del Vasco Aguirre, el entrenador de la Selección de Honduras volvió a lamentar los hechos y dejó un mensaje al respecto.
"Al final del juego el profe viene a despedirse, vino el suceso, muy triste, triste porque me sorprendió, fue algo tan rápido, tan inesperado, justo cuando el profe viene a despedirse, viene esa situación. Yo también la he vivido en carne propia en dos estadios, justo en Colombia, pero muy lamentable, así como dije conferencia de prensa, es algo que no debe suceder en ninguna parte del mundo".
"Primero nuestra profesión merece respeto, como seres humanos debemos respetarnos, la pandemia nos dio una lección, no sé qué pasa, parece que la gente no aprendió, aun así debemos de respetarnos, tenemos que valorar la vida. Un proyectil de esa magnitud puede acabar la vida con un ser humano".