La final del torneo de reservas entre Olimpia vs Motagua, que le dio un nuevo título a los Merengues, terminó siendol empañado por una pelea entre jugadores y padres de familia que se hicieron presentes en el Centro de Alto Rendimiento José Rafael Ferrari.
Cuando el juego estaba por concluir, con el 3-0 a favor de los locales, en un costado de la cancha los jugadores de ambos equipos comenzaron a pegarse patadas, puñetazos y se estaban dando empujones.
La situación empeoró cuando, de repente, aparecieron miembros del cuerpo técnico del Olimpia y Motagua e incluso padres de familia que corrieron a defender a sus hijos en pleno desarrollo del partido.
El zafarrancho se trasladó al otro extremo de la cancha y posteriormente elementos de la Policía Nacional de Honduras ingresaron a detener a la persona que habría provocado todo el altercado.
Al ver lo ocurrido, y para calmar los ánimos, Merlin Soto decidió finalizar el partido y de esta manera el Olimpia se consagraba con un título más en el torneo de reservas de la Liga Nacional de Honduras.