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Una vez finalicen las actividades del premundial y preolímpico sub-20 de la Concacaf, el estadio Morazán volverá a manos de la Municipalidad de San Pedro Sula que tiene establecido un plan para mejorarlo.
De acuerdo con el alcalde de la ciudad, Roberto Contreras, la grama se someterá a un mantenimiento preventivo luego de lo expuesta que quedó por las intensas lluvias que azotaron la ciudad.
"Ya nuestros técnicos en lo que es el campo estuvieron revisando, el estadio era una mesa de billar pero lamentablemente cayeron 70 milímetros de agua, se jugaron tres partidos, y ahí fue donde se dañó la cancha", indicó al periodista Américo Navarrete.
El edil sampedrano explicó que en estos momentos se están haciendo los trabajos necesarios para que la grama esté en optimas condiciones y se pueda jugar bien contra Estados Unidos.
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Sobre el castigo que él había impuesto al Real España, Contreras admitió que fue suspendido pero que tomarán medidas que tienen que ver con el implemento de medidas de seguridad nuevas en el recinto deportivo.
"Acabamos de adquirir seis drones para efectos de control de seguridad de toda la cancha, de lo que es el estadio; ahora vamos a tener control de todos los aficionados con los seis drones volando", explicó.
De acuerdo con el político sampedrano estos aparatos estarán volando sobre el estadio durante el partido y se dirigirán donde empiece un disturbio, ya que así podrán ver en sus cámaras quienes son los culpables en los incidentes de violencia.
"Ahora si obligatoriamente tenemos que portarnos bien en los estadios, si el real España quiere volver a jugar yo no le veo ningún problema pero tiene que arreglar con la Comisión de Disciplina que fue la que le impuso los seis partidos de castigo", opinó.
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