El duelo entre Olimpia y Motagua por el Clásico Capitalino parecía cambiar su rumbo en el minuto 90+4 luego que el árbitro Nelson Salgado señalará una falta penal a favor de las águilas azules luego que el balón hiciera contacto con la mano de Julian Martínez.
Pese a los reclamos de los jugadores merengues la infracción era evidente y los dos protagonistas del enfrentamiento, Agustín Auzmendi y Edrick Menjívar, se preparaban para este momento que sería decisivo.
El delantero argentino se ponía en posición y miraba frente a frente al cancerbero de los leones, Salgado daba la señal y Auzmendi enviaba un remate fuerte al poste derecho donde Menjívar lograría atajar de gran forma y recibiría un poco de ayuda del horizontal que evitó que el balón se colara al fondo de la red.
Tras ver su fallo, Auzmendi se lanzaba al suelo, lamentándose por fallar una oportunidad que habría cambiado el resultado, sus compañeros llegaron para darle ánimos en una muestra de la unidad que existe entre los jugadores del Motagua ante la adversidad.